Nubes, casitas, tulipanes...

Gracias a todo esto crea una atracción que te deja pegado a sus cuadros y como en este caso en concreto al vídeo Haikus [2002], sé de uno que no se lo pasó como un niño chico viendo esos dibujos en movimiento y esos soniditos como de bebés aprendiendo a hablar.
Buen videoarte de nuevo [al final me aficiono a esta disciplina].
NOTA1 La imagen no corresponde con Ichino pero sí del CAAC, me hizo gracia, además no encontré ninguna foto de la obra que os digo. ¿Para cuándo el videoarte en internet?. Ah no, que Arroyo dice que el negocio es el negocio...
Etiquetas: Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, Tami Ichino
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home